lunes, septiembre 25, 2006

Van Gogh y su oreja (1).



Hace unos días vi la película de Vincent Minelli "El loco del pelo rojo" (Lust for life) de 1956 basada en la novela de Irving stone Lust for life. Siempre que la veo me quedo impresionado por el sufrimiento que padece van gogh y por cómo este sufrimiento convive dinámicamente con su afán por reconocer la verdad del color, de la luminosidad y del dibujo, y que interpreta magníficamente Kirk Douglas.
Buscando entre los libros perdidos del joven raskolnikov me encontré con varias referencias a Vincent Van Gogh. ¿Cómo fue posible que alguien de su talento muriera en la miseria?, ¿hasta qué punto su enfermedad mental activó su creatividad artística?, es decir, ¿era la gran sensibilidad que poseía producto de su psicopatología?, ¿cómo su hermano theo decidió apoyarle hasta el final siendo prácticamente el único del mundillo del arte que confiaba en el genio de su hermano?, ¿qué hay de mito en la actual valorización de su pintura? etc...
Pero me llamó la atención un hecho más concreto de su vida, un hecho que implicaba a otro gran pintor de la época, Paul Gauguin, es decir: ¿por qué van gogh se cortó la oreja?

Van gogh nació en 1853 en Groot zunderf, en los Países Bajos.
En 1874 se traslada a Londres como empleado de una sucursal de la galería de arte goupil.
En 1878 se va como misionero voluntario a la región minera de Borinage.
En 1880 se interesa por el dibujo, copia a Millet.
En 1883 trabaja al aire libre, pinta paisajes y a la gente del pueblo trabajando. En una carta a Theo Van gogh: "Te pregunto: ¿conoces en la vieja escuela holandesa un solo cavador, un solo sembrador?¿Han intentado jamás hacer "un obrero"? ¿Velázquez lo intentó en su Aguador o en sus tipoS populares? No."
En 1886 se matricula en la academia de bellas artes de Amberes. Se muestra impresionado por la fuerza y el color de la pintura de Rubens.
Ese mismo año viaja a parís donde conoce a Monet, Pisarro, Degas, Renoir y Signac.
En 1887 participa en una exposición junto a Gauguin, Tolouse Latrec y Emille Bernard.
Llega a arlés en 1888 en su búsqueda incansable del color y la luz de la naturaleza. "Estoy muy contento. El día de hoy por otra parte fue bueno. Esta mañana trabajé en un huerto de ciruelos en flor, de pronto comenzó a hacer un viento formidable, un efecto que nunca había visto más que aquí, y que volvía a ratos. Entre tanto sol que hacía brillar todas las florecitas blancas. ¡Era realmente hermoso!".
El 20 de octubre de 1888, Gauguin por fin atiende a la petición de Van Gogh de reunirse con él en Arlés para crear una corporación de artistas. Las confrontaciones entre ambos son continuas tanto a nivel de convivencia como a nivel artístico. "Él es un romántico; yo, en cambio, siento más bien inclinación por los primitivos; en cuanto a la aplicación de la pintura, él es aficionado al "impasto", mientras que yo odio la ejecución desordenada", decía Gauguin quien finalmente decide abandonarlo tras un ataque de cólera de Vincent en el cual éste le tira un vaso de absenta y su contenido. Así lo cuenta Gauguin:
"Evité el golpe, y cogiéndole por los hombros, salí del café... Unos minutos después, Vincent dormía en su cama... A la mañana siguiente, al despertarse, me dijo: -"Querido Gauguin, tengo un vago recuerdo de haberte ultrajado anoche. -No se hable más de ello -le repliqué-, pero la escena de ayer podría reproducirse, y si fuese golpeado, podría ocurrir que perdiese la cabeza...Permíteme que escriba a tu hermano para anunciarle mi regreso."
Después de esa cena Gauguin salió solo y cuando pasaba por la plaza Víctor Hugo escuchó unos pasos tras él, se volvió y allí estaba Vincent -siempre según la versión de Gauguin que es la única conocida hasta ahora- dispuesto a abalanzarse sobre él con una navaja de afeitar en la mano. Dice Gauguin al respecto: "La mirada que le dirigí debió ser muy firme porque, deteniéndose, bajó la cabeza y se dirigió corriendo a nuestra casa...Por mi parte, me encaminé a un hotel de arlés, tomé una habitación y me acosté...Agitado, no pude conciliar el sueño hasta las tres de la madrugada y a la mañana siguiente me desperté hacia las siete y media...Al llegar a la plaza distinguí un enorme gentío. Cerca de nuestra casa había unos gendarmes y un señor bajito tocado con un sombrero hongo: el comisario de policía".
Van Gogh se había cortado la oreja la noche anterior y envolviéndola en un sobre la entregó en un burdel diciendo a su destinataria: "tome usted, un recuerdo mío".
Es decir, conocemos todo esto por palabras de Gauguin, en realidad nadie presenció aquel encuentro en la plaza Victor Hugo. No digo que Gauguin le cortara la oreja, la verdad es que Gauguin también estaba un poco perturbado ya que había abandonado su trabajo en la bolsa primero y a toda su familia después para dedicarse a pintar cuadritos -decisión que siempre le agradeceremos todos los aficionados a la pintura pero que quizás no se lo agradeciesen tanto su mujer y sus hijos-, pero no creo que fuera un cortador de orejas de amigos. Rita Wildegans, historiadora del arte de Hamburgo, no lo cree así. Piensa que Gauguin le cortó la oreja a Van Gogh estando ambos borrachos y Vincent volvió a su casa desangrándose. Quizás no lo denunciara por la admiración que Van Gogh sentía por Gauguin: "Todo cuanto hace tiene un no sé qué suave, conmovedor y asombroso. La gente no lo comprende todavía, y él sufre porque no logra vender nada; tal como ocurre con -otros, auténticos- poetas."
No sé realmente lo qué sucedió aquella noche, ni sé si fue el comienzo del fin para Van Gogh -18 meses después se suicidaría pegándose un tiro ¡en la barriga!-, sólo sé que Van Gogh posiblemente sufriera algún tipo de enfermedad mental que le atormentaba, y que si hubiera vivido en nuestro tiempo hubiera sido tratado con antipsicóticos como risperdal o zyprexa y su vida hubiese sido mucho menos angustiosa y sobre todo más longeva.
Van Gogh murió a la edad de 37 años el 29 de julio de 1890, atendido por el doctor Gachet y su hermano Theo, tras dos días de intensa agonía.

2 comentarios:

pirlosky dijo...

estimado danivan: ¿cómo llegó una pistola a manos de van gogh?

k dijo...

señor pirlo:
no hay duda de que esa cuestión es muy interesante y dvh intentará hacer todo lo posible para esclarecer ese hecho y otros relacionados con la muerte desafortunada de VG. quizás más negligente que la adquisición del arma fuera la poca vigilancia a la que estaba sometido un enfermo mental que supuestamente ya se había cortado una oreja.
pero dvh no dejará en paz al culpable hasta que expíe su culpa.

señor invisible:
la leyenda dice que VG sólo vendió un cuadro en vida y lo hizo a anna boch, la hermana de su amigo escritor -al que él llamaba el poeta- eugene boch y del cual se conserva un retrato realizado por el mismo vg en el museo d´orsay en parís.
el cuadro vendido en cuestión se titula la viña roja, lo pintó en arlés en 1888 y lo vendió por 400 francos y actualmente se halla en el museo pushkin de moscú.
no obstante parece ser que realmente no fue el único cuadro vendido en vida del pintor.no sé más.
saludos